Y lo siento en el alma.
La razón es que las horas que consigo arrancarle al día para sentarme delante del ordenador las dedico casi exclusivamente a terminar de revisar el centenar de artículos que todavía tengo en la carpeta "artículos para el blog de sueño infantil". Son los artículos que todavía me parecen importantes de años pasados y los publicados este año hasta Junio. Cuando acabe todo este trabajo actualizaré la búsqueda con los publicados hasta el día de hoy y espero que a partir de entonces sólo tenga que ir añadiendo los más recientemente publicados que serán 1 o 2 a la semana (como mucho), o tal vez ni eso. Y entonces retomaré este blog para seguir contándoos cosas interesantes sobre ciencia relacionadas con la crianza de nuestros hijos.
Porque la temática de este, mi blog personal, va avanzando y cambiando, como yo misma. He tenido épocas de escritos más intimos, épocas (estas fueron las más largas) reivindicadoras, guerreras, de salvadora de la humanidad. Épocas que no dejaba "títere con cabeza".
Pero estas ya han pasado. Tal vez sea solo un síntoma de madurez, o tal vez sea que en los últimos meses las acciones de los otros se han convertido en cierta forma en un espejo de mí misma en el que he visto reflejada una imagen que no me acababa de gustar vista desde enfrente. Ya no tengo ganas de luchar contra nadie porque me doy cuenta que una lucha basada en el ataque a "los otros" no sirve para mucho más que enemistarte con la mitad del mundo. Y eso, la verdad, es una pérdida de tiempo porque ni convence a nadie de tu opinión, ni haces nada constructivo con tu esfuerzo.
Así que he pasado de mi etapa de apisonadora a mi etapa constructora. A partir de ahora quiero dedicar mi esfuerzo a algo positivo: mostrar lo que la ciencia va publicando de los temas más diversos sobre la infancia. Revisando la bibliografía para el blog del sueño he ido adquiriendo artículos interesantísimos que por irse un poco del tema no voy a integrar en dicho blog, pero que merecen ser analizados y mostrados a los padres.
Y con el gusto que le he cogido a las búsquedas bibliográficas, en cuanto el blog del sueño me deje un poquito libre - eso será hacia principios del año que viene - me pondré a ello.
Así que mi nueva "reeducación" va a venir de la mano de la ciencia, principalmente, y de las más diversas lecturas que aporten riqueza y conocimientos a mi maternidad. Eso es lo que iré compartiendo con vosotros.
Y ahora sigo con mi trabajo del sueño infantil, un poco pesado en ocasiones pero inmensamente interesante, sobretodo cuando, tras añadir al blog del sueño unos 350 artículos, la imagen del debate científico sobre el sueño infantil que tengo en mi cabeza va tomando por fin una forma consolidada.
Volveré pronto, hasta entonces os suplico paciencia y os animo a ir visitando "El Debate Científico sobre la realidad del Sueño Infantil" porque en este momento va creciendo a pasos agigantados.
Me alegra y me entristece al mismo tiempo, me alegra porque hacía mucha falta un blog como El debate científico sobre la realidad del sueño infantil, y creo que el tiempo y el esfuerzo que inviertes en él merecen la pena; me entristece porque me encantaba leerte también por aquí, en especial, para qué negarlo, en tus etapas apisonadoras, jeje.
ResponderEliminarEspero que sea un hasta pronto.
Un beso.
Te entiendo y comprendo tu sentir, María. No se construye desde la lucha y evolucionar es crecer.
ResponderEliminarMe alegra ver tus logros y sigo tu blog sobre el sueño infantil, es el único que vale la pena en cuanto a estos temas. Te animo a seguir.
Un abrazo.
Sinceramente, María, como científica yo te agradezco muchísimo el trabajo que estás haciendo, y lo aprecio más si cabe porque sé lo que cuesta, yo recomiendo tu blog del sueño a todo padre, madre, o profesional, que realmente quiera leer un debate científico, bien planteado y respetuoso. ¡Gracias por todo lo que aprendo contigo!! Y aún más gracias por tu capacidad de autocrítica y de reeducación y construcción, gracias por regalarnos ese pedazo de persona que eres a través de tus escritos. ¡¡ Un abrazo enorme!!
ResponderEliminarqué maravilla María!!! cuánta falta nos hace a las madres el poder mirarnos, aprender de lo vivido, y evolucionar....eso es justamente lo que leo hoy en tí. Graciasssssss....
ResponderEliminarYo también como tú he dejado de luchar, en especial desde que mi querida Laura Gutman me hizo entender que vivimos nuestros partos como nuestra vida...y yo la vivi luchando y asi tuve a mi primera hija...con mucha lucha...y no quiero que sea así para el siguiente.
Asi que yo como tú a dejo de pelear y me dedico a construir, a aprender y a brindar.
Un abrazo
Andrea