martes, 6 de diciembre de 2011

SOBRE MÉTODOS CIENTÍFICOS, RESULTADOS, CONCLUSIONES Y PERIODISMO DE DIVULGACIÓN (I)

El 19 de septiembre de este año salió publicado en La Vanguardia el siguiente artículo:


Dicho artículo se basa en tres fuentes:  por un lado en dos trabajos científicos publicado en sendas revistas especializadas en los años 2010 y 2011, y por otro en lo publicado en el número 30 de la Colección de Estudios Sociales de la Fundació La Caixa, escrito por diferentes expertos nacionales y extranjeros.

Como hace mucho tiempo que perdí la fe en los artículos periodísticos, aunque sean los de un diario tan serio como La Vanguardia, me fui de cabeza al Medline en busca de las referencias bibliográficas "casi" citadas (y digo "casi" citadas porque la autora no se molesta en poner la referencias completas,  lo que hubiera sido lo más correcto). Los dos trabajos son los siguientes: 

1- Maternal employment and child socio-emotional behaviour in the UK: longitudinal evidence from the UK millennium cohort study. 
McMunn A, Kelly Y, Cable N, Bartley M
J Epidemiol Community Health 2011, Jan 10. 


2- Maternal work early in the lives of children and its distal associations with achievement and behavior problems: A meta-analysis.
Lucas-Thompson R
Psychol Bull. 2010 Nov;136(6):915-42.

Pude tener acceso a los dos artículos completos gracias a mi compañera de tribu y coautora de Una Nueva MaternidadMaria José García, y hoy me gustaría centrarme sólo en el primero, porque el segundo es un meta-análisis muy denso que todavía no he tenido tiempo de trabajar en profundizad y que además requerirá un post por sí solito.  Por otra parte, este primero es  la piedra angular del artículo de La Vanguardia, que lo utiliza como la gran prueba científica de que la separación de los bebés de sus madres no sólo no tiene consecuencias negativas sino que las tiene positivas. Cito textualmente:

"......según numerosos estudios, los hijos de padres trabajadores, sobre todo de las mujeres, tienen un buen desarrollo social y emocional, incluso, mejor que los niños de madres no trabajadoras.
Así lo asegura un reciente estudio realizado por el Economic and Social Research Council, del Reino Unido, y publicado en Journal of Epidemiology and Community Health. El trabajo, dirigido por la doctora Anne McMunn, llega a esta conclusión tras evaluar el desarrollo de casi 19.000 menores nacidos entre los años 2000 y 2002.

La investigación va más allá y revela que los resultados son positivos, incluso, en el caso de los niños cuyas madres trabajaban antes de que ellos cumplieran doce meses. Según la doctora McMunn, estas conclusiones echan por tierra algunos trabajos que apuntaban a la influencia negativa para aquellos bebés cuyas madres trabajaban fuera del hogar. Su estudio, asegura, no muestra que esto tenga un efecto perjudicial en el pequeño a largo plazo. Al contrario.

"Algunos estudios han sugerido que las madres que trabajan fuera de casa durante los primeros doce meses de vida de un niño pueden influir de forma decisiva en el desarrollo personal de sus hijos. Pero en este estudio no hemos detectado ninguna evidencia de posibles influencias perjudiciales a largo plazo que las madres puedan ejercer sobre el comportamiento de sus hijos por el hecho de trabajar", afirma McMunn."



Tras leer semejantes declaraciones me fui de cabeza a destripar tan revolucionario trabajo de investigación y la verdad es que fue, cuanto menos, decepcionante. Que queréis que os diga, los mismos autores me lo pusieron en bandeja.

Os explico: en este estudio los resultados y las conclusiones son las siguientes:

ResultsThere was no evidence of detrimental effects of maternal employment in the early years on subsequent child socio-emotional behaviour. There were significant gender differences in the effects of parental employment on behavioural outcomes. The most beneficial working arrangement for both girls and boys was that in which both mothers and fathers were present in the household and in paid work independent of maternaleducational attainment and household income. Conclusion: No detrimental effects of maternal employment in the early years were seen. There were important gender differences in relationships between parental working arrangements and child socio-emotional outcomes.

o sea

"Resultados: No hubo evidencia de efectos perjudiciales del empleo materno en los primeros años del niño en el comportamiento socio-emocional posterior. No hubo diferencias significativas en los efectos de empleo de los padres en los resultados conductuales. El acuerdo más beneficioso para  niñas y niños es aquel en que las madres y los padres estaban presentes en el hogar y en el trabajo remunerado independiente del nivel educativo de la madre y los ingresos del hogar. Conclusión: No se observaron efectos perjudiciales del empleo materno en los primeros años. Hubo importantes diferencias de género en las relaciones entre los arreglos laborales de los padres y los resultados socio-emocionales  del niño."


Pero lo más interesante, lo que echa por tierra toda la publicación, lo encontré en el apartado de "Métodos":

"Child socio-emotional behaviour was measured when children were aged 3 years and again at 5 years using the parent fill version of the Strengths and Difficulties Questionaire (SDQ)"

o sea:

"El comportamiento socio-emocional del niño se midió  cuando los niños tenían  3 años y otra vez a los 5 años usando la versión para padres del Cuestionario de Fortalezas y Dificultades"

Según admiten los autores en el apartado de conclusiones, los cuestionarios fueron mayoritariamente rellenados por la madre. Además, cito textualmente:

"It is possible that maternal perceptions of their child`s behavior were influenced by how much time they spent at work away from their children"

Traduzco:

"Es posible que la percepción de la madre sobre el comportamiento del niño se vea influenciada por la cantidad de tiempo que pasa en el trabajo lejos de su hijo"

Esto significa que TODO el artículo, todos los resultados y sus conclusiones, están basados en el testimonio mayoritariamente de las madres (supongo que el resto serán padres o cuidador principal; no especifican). Un testimonio que no se sabe si está influenciado o no por la variable cuya influencia tratamos de elucidar: el tiempo que la madre pasa lejos de su hijo. Ni una sola prueba directamente a los niños.

Me vais a perdonar pero a mí estos métodos y estas conclusiones no me encajan. ¿Como es posible que los autores se sientan con el poder de llegar a la conclusión de que el trabajo materno no afecta a los niños basándose únicamente en los testimonios, y por lo tanto la apreciación subjetiva, de estas mismas madres cuya ausencia tratan de analizar? ¿Se ha demostrado acaso que los resultados de los cuestionarios no están influenciados por la cantidad de tiempo que estas madres pasan con sus hijos? No, ¡incluso admiten claramente esta posibilidad!

Los mismos autores nos confiesan que este "detalle" es la más "seria limitación potencial" del estudio. Yo creo que esto, mas que una limitación potencial, tira por tierra todo el trabajo. Al menos tira por tierra las conclusiones que no pueden ser otras que las de que las madres que trabajan fuera de casa no tienen una apreciación del comportamiento socio-emocional de sus hijos significativamente diferente a las que no lo hacen, o que incluso, en algunas situaciones, tienen una percepción más positiva que las madres que no lo hacen. Pero aquí no se demuestra por ningún lado que los hijos realmente tengan un comportamiento socio-emocional mejor.

Para explicar mejor lo que quiero decir dejadme que os cuente una situación hipotética: Alguien va a hacer un estudio para elucidar si las personas gorditas comemos más que las personas delgadas. Para eso nos cogen a cien yos (gorditas) y cien Paquis (mi amiga delgada) y nos preguntan cuanto hemos desayunado y comido un día cualquiera.

Para desayunar yo me tomé un bol de 80gr de cereales (400Kcal/100gr) mas 100 ml de leche semi (57/Kclñ/100ml). Mi amiga tomó un café con leche (más café que leche, unos 20 ml de leche entera, 67Kcal/100ml), una tostada de pan con mantequilla (pongamos que unos 30gr de pan que a 300Kcal/100gr son 90 Kcal, más la mantequilla). Su desayuno rondará las 200Kcal y el mio las 500 Kcal, pero si alguien nos pregunta: "Dígame su percepción de lo que ha desayunado" yo, que nunca tengo la sensación de comer demasiado, diré:

"Sólo un bol de cereales integrales y con leche semidesnatada"


y mi amiga, que cuida su peso al miligramo, dirá

"Ufff, me tomé un café con leche entera y una tostada con mantequilla y todo"

El concienzudo investigador, que ha elaborado una tabla del 1 al 5 ( de menos a más percepción de comida)para cuantificar los resultados, me da un 3 a mí (porque mi leche era semi y no había comido ni pan ni mantequilla que "engordan tanto") y un 4 a Paqui (porque su leche era entera y además tomó pan y mantequilla).

A medio día ella no pica nada pero yo no me resisto a cortar unas ronchitas del chorizo que estoy añadiendo a las lentejas, bien envuelto en rebanadas de pan (una para cada ronchita), para comérmelos sin tan siquiera fijarme, y probablemente metiéndome más de 200 Kcal en el picoteo "de nada". Picoteo que no me queda registrado en absoluto, por el que no me preguntarán o, si me preguntan, quedará como "un par de ronchitas de chorizo mientras cocinaba, sólo para probarlo"

Para la comida mi amiga no se sirve una ración de lentejas sino que espera a que acaben sus hijos ( a los que les sirve unos 70 gr por plato) para comerse las sobras y no tener que tirar, porque ellos siempre dejan algo. Yo también me como las sobras "para no engordar", pero pongo a mis hijos 100 gr por ración. Pongamos que los niños se comen unos 50 gr así que Paqui come al final unos 60 gr de lentejas y yo 150gr. Yo con pan, que como me lo corto finito no le doy importancia pero lo cierto es que me he comido unos 50 gr de pan. Mi amiga sin pan. Cuando nos vuelven a preguntar que percepción tenemos de lo que hemos comido las dos diremos: " las sobras de los niños". Las dos sentimos que no hemos comido demasiado pero mientras que Paqui se habrá tomado unas 300 Kcal en total, yo al menos he tomado 600 (entre las lentejas, el picoteo de chorizo  y el pan). Pero de nuevo el concienzudo investigador, guiado por nuestras palabras, nos da un 3 a Paqui y un 3 a mí.

Total: basándose en nuestras palabras el investigador le dará a Paqui un 7 y a mí un 6. O sea, conclusión del  "estudio" basado en la percepción de lo que comemos: ¡ las personas gorditas no sólo no comemos más que las delgadas sino que  ¡comemos menos!

¿Quiere usted adelgazar? ¡Pues coma!

La realidad: Yo he tomado en total 1100 Kcal y mi amiga 500. Casi  la mitad de lo mio. ¿Queda reflejada esta realidad en la investigación? absolutamente NO. Además las conclusiones son tan erróneas que son contrarias a las razonables y a la realidad, que no es otra que el hecho irrefutable de que las personas gorditas comemos más que las delgadas.

¿Cual ha sido el fallo? evidentemente la metodología no era la adecuada para sacar estas conclusiones. No puedes preguntar a una persona sobre la percepción de lo que come, tomarlo como una medida real y sacar la conclusión de que esto que ha dicho es lo que realmente ha comido y por lo tanto es lo que explica su peso.

Si las conclusiones del estudio hubieran sido: las personas gorditas perciben que comen menos que las personas delgadas, entonces nada que objetar. Pero no fueron estas. Evidentemente este estudio no será publicado en una revista de alto índice de impacto, porque su calidad es muy baja, pero de todas formas será publicado y un periodista que está navegando por el Medline y con ganas de crear polémica, o tal vez con ganas de poder comer todo lo que le de la gana sin sentirse culpable, se lo encuentra. Feliz de la vida saca un artículo en su periódico de tirada nacional con el siguiente titular:

Se demuestra que las personas delgadas comen más que las obesas. 

¡Ale! y se queda tan ancho. Y los millares de gordos del país amanecerán ese día con una noticia que les alegrará el día, sí, pero no ayudará en nada a resolver su problema de obesidad. 

Volviendo al primer trabajo citado por el artículo de La Vanguardia, como podéis ver en la cita bibliográfica completa, en el título no se habla para nada de los resultado ni las conclusiones, sino que se limitan a describir el tipo de trabajo y lo que hacen: "Maternal employment and child socio-emotional behaviour in the UK: longitudinal evidence from the UK millennium cohort study" que en español más o menos viene a ser:  "Empleo materno y comportamiento socio-emocional del niño en UK: evidencia longitudinal del estudio de cohorte Millenium de UK". En cambio el título del artículo de La Vanguardia hace hincapié sobre este supuestamente demostrado beneficio del trabajo materno sobre el menor. Así al público le llega la idea de que está demostrado, sin lugar a dudas y sin limitaciones de ningún tipo, que el hecho de que una madre esté separada de su hijo 10 horas al día desde que tiene un día de vida no sólo no le hace daño sino que es ¡beneficioso! 

Es evidente que desde varios sectores de la sociedad actual se nos quiere vender la idea de que conciliar es dejar a nuestros hijos cinco días a la semana en otras manos, desde al menos los cuatro meses de vida, cuando no antes. Como esto no es tragable así, a palo seco, echan mano de artículo mediocres que no demuestran nada, cuyo índice de impacto es mínimo pero que ahí están, en los bancos de citas bibliográficas. Hasta cierto punto, que la defensa de estas actitudes tenga que recurrir a ciencia de tan baja calidad es un consuelo para los que no las compartimos, ya que nos demuestra la inexistencia de verdaderas pruebas sobre la inocuidad de semejante "conciliación" laboral. Pero por desgracia siempre habrá gente que se quiera dejar convencer, prefiera seguir con los ojos cerrados y no quiera ver que la única solución pasa por un cambio drástico en las prioridades de la sociedad en su conjunto, la cual debería poner por delante de todo y de todos la crianza de sus hijos, los más desprotegidos y desamparados de todos sus individuos. 

5 comentarios:

  1. Qué bueno!! Es que hay que tener un cuidado con los estudios 'científicos'... No todos somos capaces de leernos el estudio y sacar las conclusiones, claro.

    Gracias por hacerlo y compartirlo!!

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  2. Lo gracioso es que estos "estudios científicos" son útiles y necesarios para quien necesita justificar sus actuaciones, por ello los hacen.
    Y entendamos que, muchas madres que se van a trabajar y pasan pocas horas con sus hijos, llevándolos de aquí para allá, necesitan que alguien les descargue de su culpa (admitida... o no reconocida).
    Gracias, María.

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  3. Son pseudoestudios, gracias por tu análisis, con el que coincido plenamente. Cada cual se arrima al estudio que dé los resultados que más interesen.
    Como si hiciese falta investigar con quién estar mejor unos hijos!
    Un saludo.

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  4. Muchas gracias por el tiempo que has dedicado a desmontar toda esa parafernalia... de un estudio segun como se enfoque o qué titular se destaque, se pueden dar opciones distintas o hasta contrarias. Enhorabuena.

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  5. Magistral, como siempre. También has cambiado mi percepción acerca de la comida ;-)

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