Pero,
tampoco quiero callarme lo que sé, lo que he estudiado y descubierto, simplemente porque alguien se pueda ofender o sentir culpable. El que no quiera oírme, simplemente, que no me pregunte, porque si lo hace le diré lo que sé y lo que pienso sin tapujos.
No quiero juzgar a nadie,
Pero:
Tampoco quiero que me juzguen cuando saco la teta para amamantar a mi hijo de 3 años. Y no, no va a estar mamando hasta la mili porque: 1- Seguramente nunca hará la mili mientras no vuelva a ser obligatoria; 2- Para entonces seguro que se estará agarrando a la teta de otra (y de otra manera, se entiende).
No quiero que llamen "lactancia prolongada" a lo que mis hijos y yo hacemos, porque no estamos prolongando nada más allá de lo que la madre naturaleza ha diseñado y dispuesto. Antes de escribir en un periódico sobre este tema en concreto, sería de agradecer que el/la periodista en cuestión se informara sobre lo que los expertos opinan que sería la duración natural de la lactancia en el ser humano. Importante tener en cuenta que sólo en los últimos dos siglos, y por motivos absolutamente ajenos a la salud de madre e hijo, se acortó lo que de manera natural debería durar varios años y se convirtió en meses, bajo la amenaza de que hacerlo más tiempo era "nocivo". Y yo me pregunto ¿Nocivo para quién? Porque hasta ahora la ciencia más pura y dura sólo ha demostrado beneficios PARA TODOS.
Así declaro que:
No quiero leer MENTIRAS en los medios de comunicación, desinformando a los padres con frases como:
"...el niño debe socializarse, y esto implica destetarse." (Javier Urra. La Vanguardía 16 de Mayo 2012). Una majadería digna de no ser nunca leída. Con semejante ex-defensor del menor no me extraña lo que ocurrió hace unos meses con la joven Habbiba y su hija.
"Lo primero que hay que preguntarse es qué mujer trabajadora puede permitirse el lujo de seguir dándole el pecho a su hijo después de la baja maternal." (Susana Quadrado. La Vanguardia 16 de Mayo 2012). Por suerte, y a pesar de las nefastas condiciones laborales de la gran mayoría de madres, muchas, señora Quadrado, muchas. Y si estas condiciones cambiaran serían todavía muchísimas más.
O que la lactancia nos produce un desgaste prematuro y nos estropea los pechos, palabras de Eulalia Solé en otro artículo de la Vanguardia, ampliamente comentado por Alba Padrós en su blog Som la llet. Lástima que todos los estudios científicos que demuestran los efectos de la lactancia sobre la madre desmientan sus palabras porque, entre otras cosas, la lactancia previene el cancer, la osteoporosis, la anemia y las enfermedades cardiovasculares. Así es difícil de creer que las madres que amamantamos estemos más "desgastadas", sobretodo en esta sociedad del exceso donde estamos sobrealimentadas. Hasta el momento, señoras y señores, sobre la lactancia sólo se ha demostrado beneficios PARA TODOS. Todo lo demás es pura CHARLATANERÍA.
Y no quiero polémicas donde no hay lugar para ellas. La ciencia habla claro y en este campo poca polémica hay. Los estudios hasta ahora son cristalinos y no dejan lugar a dudas. Pero a pesar de ello, los medios de comunicación se dedican a crear una guerra a base de enfrentar dos tipos de crianza que, en el fondo, tampoco existen como tales. Primero fue El Mundo y ahora La Vanguardia pero no son los únicos y regularmente salen en la prensa artículos cuya única intención es reavivar la llama de esta "pseudo-polémica".
Basta de polémicas inútiles, señores. Lo que tenemos que conseguir es que la sociedad apoye también a los padres que creemos que lo mejor para nuestros hijos no es dejarlos 12 horas en la guardería desde los 4 meses de vida cuando los mejores cuidadores son su propia madre o su propio padre, o darles leche de vaca cuando tenemos nuestra propia leche humana, u obligarles a dormir solos cuando pueden dormir con sus padres, o tratarlos como personas en pleno derecho y no como seres inferiores que nos pertenecen, o dejar que se desarrollen a su ritmo y no al ritmo de unos promedios y unos patrones que sólo cumplen una minoría de chiquillos.
Quiero ejercer mi maternidad como me pide mi Deseo Maternal y quiero que la sociedad me apoye en ello de la misma manera que en la actualidad apoya a las madres que deciden ignorarlo. Y para esta exigencia cuento con el aval de la ciencia, que ha demostrado y sigue demostrando que lo que mi Deseo me pide hacer con mi hijo es lo mejor para él y para mí y por lo tanto para la sociedad en conjunto. Lástima que sea necesario demostrar científicamente la supremacía de lo que la madre naturaleza ha diseñado durante ciento de miles de años de evolución frente a lo que a la mente humana se la ha ocurrido en los últimos siglos, pero así están las cosas y por eso me molesto en citar a la ciencia, porque basándome en ello creo que tengo derecho a decir que:
Quiero seguir siendo una mujer completa, personal y profesionalmente, a la vez que crío a mis hijos y eso, hoy por hoy, es imposible. Me obligan a elegir y NO QUIERO QUE ME OBLIGUEN A ELEGIR.
Si las cosas fueran diferentes yo no tendría que elegir: si me permitieran integrar mi maternidad en mi vida pública, profesional y social, en lugar de obligarme a "quedarme en casa" para poder criar a mis propios hijos, la sociedad podría beneficiarse de todo mi potencial a la vez que se beneficiaría de unos hijos que crecerían sin la herida producida por la carencia. Para eso sería necesario adaptar el mundo del día a día de los adultos a la presencia de sus niños, y esto sería posible, pero no nos dejan, porque los inamovibles de siempre se dedican a predicar a los cuatro vientos que las cosas solo pueden ser como son y a crear polémicas sin sentido.
Todo podría ser muy diferente. Quiero que todo sea muy diferente y no quiero que las cosas sigan como están.
Así nos beneficiaríamos todos, no sólo las radicales madres que practicamos esa ¿madrephilia? y sus retoños. Porque abrir la puerta al Deseo Maternal será bueno para todas y para todos, empezando por las mujeres que ni siquiera saben que lo tienen cuando les ponen a su hijo en brazos.
Y para finalizar os dejo una palabras de Casilda Rodriganez de su libro "La represión del deseo materno y la génesis del estado de sumisión inconsciente". (Ediciones Crimentales 2007)
" La madre entrañable da la vida, no retiene ni es posesiva. Las criaturas cuanto más y mejor han satisfecho sus deseos maternos, vuelan antes y mejor. La mamitis es la enfermedad de la falta de madre; la superabundancia de madre verdadera no enferma sino que expande la vida, allí donde se da."
Foto tomada de El País (22 de Mayo del 2012). La senadora del PSC Iolanda Pineda lleva a su hijo al pleno del Senado. |
Plas, plas, plas... sé que no es manera de empezar un comentario pero.... es un aplauso. Se puede decir más alto pero no más claro.
ResponderEliminarHas puesto en palabras todos todos toditos mis sentimientos y deseos como madre.
Gracias
Magnífico, María, yo también aplaudo con manos y pies.
ResponderEliminarMuchas gracias!
Te abrazo!
Hacía tiempo que no leía algo que me gustase tanto y que apoyara de arriba a abajo.
ResponderEliminarPues... otro aplauso bien gordo :-) Ojalá pudiéramos cambiar el sistema, nos contentaremos con cambiar nuestra vida e influir en lo más cercano.
ResponderEliminarAbrazos
Genial, María... Como siempre!! Un besazo.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminares que realmente es para aplaudir y hacerte la ola María!!!! cuanto charlat@n hay por el mundo!!!!
ResponderEliminarGracias
Genial como siempre.
ResponderEliminarUn abrazo.
OLE!!! Da gusto leerte! un beso
ResponderEliminarLo que es importante es tomar "conciencia" de que, tanto "El Mundo", como "La vanguardia", sólo representan a los inetereses de quienes nos quieren trabajando y "desconectados". Enchufados al televisor los padres, a la play los hijos y a trabajar todos los que sea posible para pagar a los bancos. No es casualidad que la fundación Rockefeller destinara tantos millones de dólares hace ya 50 años para "preservar la "igualdad".......enhorabuena por estas reflexiones. Ojalá mucha gente las lea. Y re-valorize. Que ya es hora....
ResponderEliminarQué bien dicho. Si es que no puedo entender que a todo el mundo le parezca más normal que un niño de tres años tome leche de una vaca que la de su madre.
ResponderEliminarGenial, María, y totalmente de acuerdo. No es cuestión de ELEGIR, sino de informarse y actuar arreglo al instinto en conexión con la propia Naturaleza. ¡Ah! quizás el problema esté en esa propia desconexión con una misma, con la Vida...
ResponderEliminarMe gustaría compartirte este artículo
http://www.asociacionsina.org/2012/05/21/lo-se-esconde-tras-la-portada-de-time/
Abrazos cálidos.
Gracias por decir lo que todas pensamos , solo que muchas no lo saben . En este país predomina el consumismo y la presión social de cara a la lactancia materna .
ResponderEliminarPues fíjate, anónimo, si se le da poca importancia que nos terminan de "desalojar" del local que ha sido nuestra sede en muchos años. Ver para creer...
Eliminarhttp://www.asociacionsina.org/2012/05/23/nos-afecta-la-crisis-sina-se-queda-sin-local/
(Con tu permiso, María)
Maria aplaudo tu reflexión y tus formas. suscribo todo lo que expresas.
ResponderEliminarun beso grande