viernes, 22 de noviembre de 2019

LA CIENCIA DEL SIGLO XIX EN LAS GUÍAS PARA PADRES DEL SIGLO XXI


El 19 de noviembre del 2019 la Comunidad de Madrid nos comunica lo que parece una estupenda noticia: el Hospital Niño Jesús publica la primera guía práctica para padres sobre Trastornos del comportamiento de niños y adolescentes, en la que se explica cómo reconocer estos trastornos, qué son, qué hacer y cómo prevenirlos. 

Teniendo en cuenta de que es una guía publicada este mismo año, el 2019, uno podría esperar que sus consejos y recomendaciones estuvieran basados en las más rigurosa y actualizada ciencia basada en evidencia. Y si bien yo no he entrado a analizar la mayor parte de esta publicación, tengo que decir que para el tema que a mí me incumbe, el sueño infantil, esto no es así.

En realidad, es todo lo contrario. Leer el capítulo de Trastornos de sueño hace llorar los ojos de cualquier especialista en sueño infantil realmente actualizado. De hecho, parece un copypaste de los manuales de crianza más anticuados y casposos que uno puede encontrar en la literatura sobre crianza. El mensaje trasmitido es tan arcaico que me quemaban los dedos por la necesidad de decirles a sus autores:
¿Cómo os atrevéis?
¿Cómo os atrevéis a escribir estas palabras a los padres? ¿Cómo os atrevéis a recomendarles cosas como las que siguen?

  • No acunes ni mezas a tu bebé para ir a dormir.
  • No le duermas en brazos.
  • No interpretes el despertar de tu bebé como hambre, sed o miedo.
  • Si se despierta no le cojas ni le des de comer, se acostumbrará a ello.
  • Para muchos niños dormir es una pérdida de tiempo, se niegan o se inventan necesidades y te llama, no cedas, si lo haces le estás enseñando malos hábitos.
  • Si al llevarle a su cama llora desesperadamente cada noche, déjale en su cuna o cama y sal del cuarto.
  • No entres en la habitación, es teatro, espera al menos cinco minutos. Si al entrar se calla, no le cojas ni le hables, sal diciendo “ahora a dormir”.
  • Si se despierta cada noche y te reclama para que le duermas, déjale llorar 30 minutos. Después entra para comprobar que está bien, algunos vomitan del enfado. No le hables, no le cojas, sal de la habitación y dices “ahora a dormir”.
  • Así durante tres periodos de media hora. Antes del tercer día tu hijo no te reclamará, habrá aprendido a dormir sin tu ayuda.

No hay ni un mínimo de evidencia científica que respalde vuestras recomendaciones. Es vergonzoso. Es denunciable. Estáis haciendo apología del maltrato infantil. El trabajo es tan burdo y zafio que ni siquiera concretáis sobre las edades de los niños (o bebés) a cuyos padres va dirigido vuestro mensaje. ¿Con que autoridad estáis diciendo a un padre que no interprete el llanto de su bebé por la noche como hambre o sed si no sabéis ni la edad que tiene? ¿Cómo os atrevéis a asegurar a todos los padres que leerán vuestra guía que el problema de su hijo es un problema “de hábitos” y mala educación? ¿Es que acaso habéis confirmado (por telepatía por lo que parece) que ese bebé o niño que llora no sufre una verdadera patología, desorden o problema que requiera la inmediata intervención de sus padres? ¿Es que acaso habéis dado claves para que los padres puedan confirmarlo? En absoluto. Os habéis limitado a asumir que ese niño que llora, o ese bebé que llora, no merece ser escuchado porque “es teatro”. Un mensaje SORPRENDENTEMENTE IRRESPONSABLE.

Por cierto, la última afirmación es, para la gran mayoría de niños, mentira. 

Que un hospital como el Niño Jesús haya permitido que una guía con este mensaje vea la luz en pleno año 2019 es desesperanzador. Es tirar a la basura medio siglo de investigación científica. Una ciencia imposible de resumir aquí, pero que cualquiera que ose dar recomendaciones a los padres debería conocer. Yo hice una humilde recopilación en el libro Dulces Sueños (Alianza 2016). Les recomiendo que, al menos, lean eso. Pero si quieren estar realmente informados les comparto encantada los 1300 artículos sobre sueño infantil (y áreas relacionadas) que tengo en una carpeta de Dropbox.

Así podrán aprender que la medicina del sueño infantil ha naturalizado el sueño en solitario, creando toda una serie de normas sin ninguna base científica ni médica sobre cómo y dónde deben dormir los niños. Pero muchos profesionales, afortunadamente, han desenmascarado esta naturalización y abogan por un abordaje más integral y objetivo de los problemas del sueño infantil. Aprenderán también que la manera natural de dormir del bebé/niño humano es colechando con sus cuidadores, principalmente su madre. Y podrán comprobar que para un sector cada vez más important, todos los profesionales e de la pediatría del sueño, y la ciencia del sueño en general, esa es la manera más saludable de hacerlo. Aprenderán que para muchos niños sus consejos pueden ser extraordinariamente contraproducentes y, de hecho, no mejoran en absoluto sus problemas de “insomnio infantil”. Para otros tal vez no supongan una respuesta tóxica al estrés, porque son más resilientes, pero les expone a un sufrimiento inútil, porque no hay ninguna razón médica por la que sus padres no deban cumplir su único deseo: dormir con ellos. Y si los padres están de acuerdo, entonces no hay problema de sueño ni hay sufrimiento. Y esto ustedes ni lo nombran.  

Hace ya cinco años la psiquiatra infantil Ibone Olza escribió un texto que se llegó a viralizar por la red. Se llamaba Desmontando a Estivill.  En él se puede leer:

Me he sentido desolada al ver esas secuelas que Estivill insistentemente niega, y que a veces tienen la forma de trastornos de ansiedad de separación, depresiones infantiles, enuresis o graves trastornos de conducta en la adolescencia. Cuando se ha conseguido que una madre o un padre desatiendan el llanto de su bebé dejándole sólo en otra habitación, cuando ya se ha producido esa primera quiebra, la confianza en los demás, la bondad, la empatía del niño o niña se pueden ver mermadas de por vida.Desmontando a Estivill. Ibone Olza MD 2012


Desde aquí quiero hacer una llamada para la inmediata retirada y revisión de esta guía. Nada así debería ser publicado sin haber demostrado la absoluta ausencia de efectos nocivos del sueño en solitario impuesto de una manera tan burda como aconsejan estos autores.

Y para finalizar quiero hacer otra llamada a mis lectores a participar en un proyecto de investigación llevado a cabo en la universidad del País Vasco, liderado por el doctor José Martín Amenabar, y que pretende evaluar los efectos de uno de los métodos más populares para forzar el sueño en solitario en nuestros niños: el Llanto Controlado, más conocido en nuestro país como Método Estivill. Para que en el futuro los profesionales del sueño infantil puedan tratar con éxito los desórdenes del sueño de nuestros hijos es absolutamente imprescindible la realización de trabajos como este. Si no, no avanzaremos nada. Los niños seguirán necesitando dormir con nosotros, los pediatras nos seguirán obligando a dejarles durmiendo solos (a pesar de las faltas de evidencia científica) y los padres seguiremos llorando, detrás de una puerta cerrada, escuchando el llanto de nuestro hijo, con el alma rota… y todo absolutamente por y para nada.

Aquí encontraréis los cuestionarios:


¡Animaros a participar!


Además, todos los profesionales de la salud infantil y la educación estáis invitados a firmar un manifiesto preparado con la intención de ser enviado a las autoridades del Hospital Niño Jesús. Aquí lo tenéis:

Manifiesto en respuesta a la Guía para Padres «Trastornos del comportamiento de niños y adolescentes» del Hospital Niño Jesús de Madrid


12 comentarios:

  1. Gracias por publicar esto. Soy pediatra y me he quedado espantada al leer lo que han escrito en el HNJ. ¡Cuesta creerlo!
    Yo consideraría iniciar una campaña de recogida de firmas para que retiraran estos mensajes que tanto daño pueden hacer a las niñas/os y a sus familias. Seguro que somos muchos los que la apoyaríamos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Miriam, en las próximas horas publicaremos un manifiesto para que firméis los profesionales con la intención de mandarlo a las autoridades pertinentes.

      Eliminar
    2. Ya hay una petición en Charge: https://www.change.org/p/consejero-de-sanidad-revisen-la-gu%C3%ADa-de-trastornos-del-comportamiento-de-ni%C3%B1os-y-adolescentes-del-hnj-de-madrid?signed=true

      Eliminar
  2. Como madre de una niña de 4 años, os doy todo mi apoyo y el de un gran número de madres de mi entorno más cercano que crian a sus hijos desde el amor, el respeto y el apego. Os toca a vosotros como expertos reconocidos iniciar la acción. Por favor hacedlo, nosotras haremos también nuestra parte firmando el documento. Gracias anticipadas

    ResponderEliminar
  3. Gracias. Si quieres puedes firmar la petición: https://www.change.org/p/consejero-de-sanidad-revisen-la-gu%C3%ADa-de-trastornos-del-comportamiento-de-ni%C3%B1os-y-adolescentes-del-hnj-de-madrid?signed=true

    ResponderEliminar
  4. Hola, soy de Buenos Aires, Argentina, completé el formulario, espero que sirva. gracias

    ResponderEliminar
  5. Gracias por advertir a las personas que existe tal guía del horror... Firmo la petició!

    ResponderEliminar
  6. Es imposible no espantarse y salir públicamente p pedir que salga de circulación.

    ResponderEliminar
  7. Por favor padres, no sigan está guía, sigan su instinto, sigan a su corazón que nunca falla. No dejen nunca desatendido a un niño reclamando cariño y atención, es sencillamente inhumano.

    ResponderEliminar